Alquilar tu propiedad podría ser considerado un deporte de riesgo. Solo apto para temerosos, hasta el héroe más valiente de cuento se asustaría ante esta tesitura. Que alguien del que no tenemos más que una impresión ocupe nuestra vivienda durante un tiempo indeterminado amilanaría a cualquiera. Sin embargo, cuando pensamos en un inquilino conflictivo nunca somos capaces de atisbar la magnitud de lo que puede llegar a ocurrirnos.
¿Qué puede llegar a ocurrir con un inquilino conflictivo?
Nuestras peores pesadillas únicamente se conforman por un perfil de inquilino conflictivo. Pensamos que quizás rehúse realizar los pagos pactados, que pueda incluso llegar a afectar con su comportamiento a nuestra propiedad, en el peor de los casos. Sin embargo, solemos desterrar de nuestros pensamientos las opciones de que el problema no sea únicamente con nosotros, sino que afecte también a los vecinos. Ahí es cuando el juego se reviste con tinieblas.
Un inquilino conflictivo puede ir mucho más allá. Su arte no entiende de límite. Compuesto por labores inclementes que abarcan cualquier espectro de la imaginación, su fuerza se halla en que no sabemos qué puede llegar a suceder. Que una de sus actuaciones desemboque en quejas con los vecinos es lo peor que puede ocurrir y ello será consecuencia de ruidos excesivos, de causar problemas en zonas comunes, de tratar mal al resto de los miembros de la comunidad…
Para un propietario tener un inquilino conflictivo es un problema muy grave. Le sitúa en una situación de compromiso que, con habitualidad, no sabrá cómo gestionar. No conocemos las armas de las que disponemos ni de los caminos que se pueden tomar. Por ello en este artículo te queremos mostrar cómo actuar en este panorama.
¿Puedo rescindir de manera unilateral el contrato de alquiler de un inquilino conflictivo?
Es una pregunta muy habitual. Todos los que la plantean anhelan un sí por respuesta, pero esto se aleja mucho de la realidad. En un tema tan importante como es el de la vivienda, no se prevé en ningún caso que una de las partes pueda rescindir el contrato de manera unilateral. Ni siquiera aunque una de ellas se trate de un inquilino conflictivo demostrado y con el apoyo de la comunidad de vecinos en esta afirmación.
De esta manera, si como propietario quieres tratar todo el tema del inquilino conflictivo vas a tener que hallar otro camino. Hay varias posibilidades para solventar esta situación. Así que solo te pedimos que, por ahora, respires. No hace falta que el nerviosismo y la ansiedad acaben contigo.
¿Qué soluciones te proponemos para tratar con un inquilino conflictivo?
Seamos sinceros. Cuando te hemos dicho que no podías rescindir de manera unilateral el contrato de arrendamiento con el inquilino conflictivo has pensado que éramos mala gente. Qué ibas a hacer si no. Te ponemos la miel en los labios para arrebatártela con determinación cuando estás a punto de saborearla.
Pero no te preocupes. Hemos venido preparados para esta misión. Te traemos tres pasos para tratar con un inquilino conflictivo. Eso sí, recuerda que cada uno supone una mayor intensidad en el trato. De tal manera que si un paso no funciona puedes apostar por el siguiente para seguir moviendo ficha.
Las tres pautas para solventar el problema de un inquilino conflictivo son:
- Habla y trata de hacerle comprender la situación.
- Envío de burofax con acuse de recibo.
- Denuncia judicial.
¿Las analizamos en profundidad?
Habla con el inquilino conflictivo y trata de hacerle comprender la situación
Todos somos personas. El mayor poder del ser humano radica en su palabra. Son muchas las ocasiones en las que los problemas con inquilinos conflictivos surgen a raíz de malentendidos. Por ende, lo primero que tenemos que hacer es tratar de poner en contexto la situación.
De esta manera, nuestro primer consejo es que te acerques y hables con él. Coméntale el malestar general de la comunidad de vecinos y las actuaciones que han llevado hasta ese punto. Quizás no se haya dado cuenta de que actúa como inquilino conflictivo. Además, trata de hacerle comprender que es un problema para ambos, pues la situación también te coloca en un compromiso.
Lo más probable es que con esta conversación se solvente el problema. No obstante, si el inquilino conflictivo continúa en sus trece todavía tienes mucho más camino por recorrer.
Envía un burofax con acuse de recibo
El siguiente paso comenzará a tensar la situación. Si la charla amable que te hemos comentado no ha dado el resultado esperado, a continuación tenemos que enviarle un burofax al inquilino conflictivo.
Recuerda que tiene que ser siempre con acuse de recibo. Será tu as bajo la manga en caso de que tengas que acudir a diligencias judiciales por esta problemática. Así podrás probar que has tomado las medidas oportunas para hacerle comprender la situación, su comportamiento y todo lo que ha significado para la comunidad de vecinos.
En este burofax deberás informarle sobre la situación que se está gestando en la comunidad de vecinos a causa de su comportamiento. Relatarás las actuaciones que le conforman como inquilino conflictivo, de manera que señales cada una de las realidades que han llevado la situación hasta esa realidad.
Además, se recomienda poner sobre la mesa siempre la advertencia de que se tomará el camino de las acciones legales en caso de que no cambie su comportamiento.
La demanda judicial como último paso
Esta es la última acción que te recomendamos tomar. Su mera presencia complica todas las situaciones. Cuando se formula demanda judicial se pretende rescindir el contrato de manera definitiva y así acabar con los problemas de convivencia que se han generado a causa de su conducta.
No obstante, este será el proceso que más tiempo requiere y genere una mayor tensión con el inquilino conflictivo. Por ello siempre se recomienda tomar todas las medidas posibles para no alcanzar esta situación.
Estos son los tres pasos que te recomendamos seguir para tratar con un inquilino conflictivo. Cualquier duda que tengas puedes formularla en los comentarios.