En LaEncontré somos un poco mala gente. Esperamos que estés leyendo este artículo en plena noche. Que lo hagas en un lugar silencioso. En un espacio donde la tranquilidad solo pueda ser perturbada ante el chirriar de un metal que, desesperadamente, está cantando en busca de aceite.
Estas son las condiciones propicias que te van a ayudar a viajar hacia el pasado, a aterrizar en Estados Unidos y conocer la intrigante historia de un autor en Baltimore. Así era la casa de Edgar Allan Poe. El precursor de la novela detectivesca en la literatura. Instaurador de una nueva forma de buscar el miedo a través de las letras.
Baltimore fue inspiración para Edgar Allan Poe
Describir la vida de Edgar Allan Poe es muy complejo. Y eso que solo vivió unos pocos años.
Si llega a tener una existencia plena, a saber qué podríamos haber dicho. Sin embargo, se fue como vivió. Siempre enredado en su propia oscuridad, siempre sin ser aceptado por la manera en la que veía el mundo. Todavía, más de un siglo después, desconocemos las causas exactas de su muerte. Pero bueno, puede que sea mejor así, que el final de su vida esté tan marcado por el terror como sus historias.
El de Boston vivió y murió pobre. Su padre adoptivo nunca lo tuvo en demasiada gracia.
Sobrevivió en muchas ocasiones gracias a que era el ojito derecho de su madre. Sin embargo, el hecho de que al primero no le gustara que quisiera dedicar su vida a las letras implicó que sus desencuentros fueran demasiado habituales y que su relación se rompiera, incluso en los momentos de mayor necesidad para el autor.
Edgar Allan Poe malvivió con una salud más ligera que la de una pluma y una adicción al alcohol que le cerró las puertas de todos los espacios donde tuvo una mínima oportunidad de rehacerse ante las constantes calamidades que la vida le ponía delante. Finalmente moriría en extrañas circunstancias, en un misterio todavía no se ha podido desentrañar.
La casa de Baltimore
Es imposible desligar la historia de su casa de Baltimore y la de su vida. Fueron de la mano. Juntas. Paseando a través de los anhelos del tiempo. Tratando de encontrar cada uno en el otro una razón para continuar.
Edgar Allan Poe había nacido con corazón de artista, pero malvivió sin recursos. En su muerte no creemos que hubiera imaginado que hoy en día sus historias serían veneradas por tantas personas, pero en el momento no le interesaban ni siquiera a los miembros de su familia.
Vivió en ella entre 1883 y 1885.
En ella se produjo su mayor proliferación como artista. o en vano, sus episodios de mayor felicidad y de mayor desgarro de dolor las vivió dentro. Allí se mudo con su amada,Virginia Clemm, que además era su prima y, para más inri, contaba solo con trece años cuando contrajeron matrimonio. Pero también fue el lugar donde ella murió, a causa de una tuberculosis. Dejó al escritor tan tocado que nunca pudo recuperarse en vida.
Un hogar que ha vencido a la muerte
Puede que te parezca una tontería, pero que esta vivienda se mantenga en pie es prácticamente un milagro. Su mal estado había llevado a fijar en el año 1941 su demolición. Sin embargo, en el último momento, como si se tratara de una película y siguiendo la narrativa coherente de la propia vida del escritor y de su trabajo, la Edgar Allan Poe Society se presentó, consiguió que se la cedieran en términos de arrendamiento y la restauraron y abrieron al público en forma de museo el centenario de su muerte.
¿Te gustaría formar hoy parte de una de sus historias?