En el último post que publicamos durante el año pasado te contamos que uno de nuestros propósitos de cara a 2019 es el de reducir el costo de los suministros en el hogar. Por ello, no queremos dejar pasar ni un día más sin ponernos manos a la obra. Antes de que las buenas intenciones se consuman, toca arrancar. De esta manera, hoy te queremos dar tres consejos para ahorrar en la factura del agua de tu cuarto de baño.
Por qué es fundamental ahorrar en la factura del agua de un baño
Ahorrar en agua no tiene un trasfondo meramente económico. Se trata de un recurso escaso. Hay que protegerlo y emplearlo con eficiencia. Todos somos conscientes de lo fundamental de su cuidado y uso responsable. Por tanto, toca conseguir dos metas de una sola jugada.
Así que si quieres que tu cartera brille por su groso y que tus remordimientos medioambientales queden bien lejos, entonces apunta estos tres consejos que te brindamos a continuación:
- Dúchate en lugar de bañarte.
- Cronometra el tiempo que estás debajo del agua.
- No dejes correr el agua.
Te las vamos a explicar de manera individualizada. Aunque suponemos que ya tienes claro por qué lugar va cada una de ellas.
Dúchate en lugar de bañarte
Sabemos que este consejo parece de perogrullo, pero también somos conscientes de que, en muchas ocasiones, la realidad supera a la ficción. Y es que, te sorprenderías por la cantidad personas que, en pleno 2019, sigue eligiendo con asiduidad la ducha respecto del baño. ¡Con la cantidad de coste de litros que esto supone!
De esta manera, si en lugar de sumergirte en el agua caliente de una bañera, apuestas por la ducha consumirás, de media, unos setenta litros menos. ¡Casi nada! Eso supone un ahorro en el coste mensual y en el planeta.
La vida tampoco va de eregirse como héroe ante cualquier circunstancia. Por ello, no te estamos pidiendo que renuncies durante toda tu vida a bañarte. Puedes darte el capricho de vez en cuando. Por ejemplo, una vez al mes, que seguro que tus nervios van a agradecer esos momentos de pausa y tranquilidad.
Cronometra el tiempo que estás debajo de la ducha
Pacta contigo mismo el tiempo máximo que te vas a dedicar debajo del agua. Cuanto tengas una cuantía, coloca el smartphone en modo temporizador. Abandona la calidez de la corriente en cuanto esta prenda.
Te vas a sorprender, pero se calcula que en tan solo cuatro minutos cualquier persona puede ver satisfechas sus necesidades de limpieza. Además, te prometemos que te van a entrar ganas de superarte. Cada día querrás dedicar unos cuantos segundos menos.
No dejes correr el agua
Es independiente la situación. Ya sea lavándote la cara, duchándote. También cepillándote los dientes, ten la suficiente responsabilidad de cerrar el grifo siempre que no sea necesario. Si no, estarás menospreciando una gran cantidad de litros cada día que serían suficientes para arreglar la vida de una persona en otros países durante mucho tiempo.
No podemos actuar sin pensar en las consecuencias porque la realidad es que cada gesto que tenemos en casa, las tiene.
Así que ya sabes. Cuando no lo necesites, grifo cerrado. Lo agradecerás a final de mes. Desde aquí, nosotros te damos, también, las gracias en nombre del planeta.
Estos son los tres consejos que te brindamos para ahorrar en la factura del agua a final de mes en el baño y, además, concienciarte un poco más en cuanto al cuidado del planeta. Por cierto, ¡queremos pedirte tu ayuda! ¿Nos dejas en los comentarios qué ideas sumarías tú a esta retahíla?